El ministro de Exteriores británico, James Cleverly, ha defendido este miércoles los planes económicos impulsados por la nueva primera ministra, Liz Truss, y los ha comparado con “medicinas amargas” que “pueden desagradar a la gente pero que son beneficiosas para ellos”. Así, ha sugerido que Reino Unido “está enfermo” y que necesita una “cura económica”, al tiempo que ha matizado que “la gente no está acostumbrada a hablar de los efectos estimulantes de los recortes de impuestos y el crecimiento que puede acarrear la desregulación”. “Es entendible cómo está reaccionando la población. La gente …