La cardiomiopatía arritmogénica puede provocar una muerte súbita, que afecta sobre todo a los jóvenes deportistas. Ahora, investigadores de la Universidad de Basilea (Suiza) han modificado genéticamente ratones que desarrollan una enfermedad similar a la de los humanos. Esto ha permitido al equipo identificar mecanismos hasta ahora desconocidos y posibles dianas terapéuticas. En agosto de 2007, el jugador del Sevilla Club de Fútbol Antonio Puerta, de 22 años, sufrió una parada cardíaca y se desplomó en el campo, falleciendo en el hospital unos días después. Más tarde se descubrió que el jugado…