El nuevo jefe de la Policía Metropolitana, Mark Rowley, ha reconocido que son “cientos” los agentes que deberían estar fuera del cuerpo, después de que se conozcan las primeras conclusiones de un último informe, que saldrá a la luz el próximo año, en el que se señala que más de 1.200 infractores permanecieron en sus puestos a pesar de comportamientos inadecuados. “Llegas a la conclusión de que debe haber cientos de personas que no deberían estar aquí, que deberían ser expulsadas”, ha dicho Rowley, quien ha reconocido como “muy insuficientes” las cifras anuales de entre 30 y 50 agentes expulsad…