Kiev, la capital ucraniana amanecía este sábado cubierta por un gran manto blanco, la nieve es la señal que marca el arranque de los tiempos más duros desde el inicio de la invasión rusa. Los intensos bombardeos sobre las infraestructuras energéticas del país han dejado a millones de personas sin luz. Algunos vecinos, como Eugenia hacen gran parte de sus tareas diarias prácticamente a oscuras, con la ayuda de unas cuantas velas. Y no sólo en Kiev, en otras grandes ciudades como Odesa, la situación es similar como explica la vendedora de una tienda de ropa “Cada día es peor porque los rusos est…